Pionero; inventamos el ‘buzziness’

Apasionado de los insectos desde una edad temprana, en 1987 Roland De Jonghe, un veterinario de Westerlo, fue pionero con la idea mágica de usar abejorros para polinizar tomates en su propio invernadero. Resultó ser un gran éxito y Roland no dudó en comenzar a producir abejorros sobre una base comercial. Ahí es donde comienza la historia de Biobest.

Gracias a la polinización de abejorros, los productores de tomate han visto grandes mejoras en el rendimiento de sus cosechas y en la calidad. Otra ventaja ha sido el ahorro de mano de obra. Mientras se daba una revolución para los cultivos de tomate, se fueron introduciendo abejorros para la polinización en varios otros cultivos. Gracias a este avance tecnológico masivo y a la mentalidad pionera de Roland y de su equipo, Biobest no tardo en convertirse en una compañía internacional.

Como abejorros demostraron ser una mano de obra valiosa, los productores han incrementado el cuidado con el uso de insecticidas químicos. Esto ha creado un gran avance en el mundo del control biológico ya que los productores buscan constantemente alternativas biológicas para garantizar un ambiente de trabajo saludable para su población de abejorros. En este campo, Biobest también es elogiado por varias sus innovaciones. Es por eso que podemos decir orgullosamente, "inventamos el buzziness". Treinta años después de que se fundó la compañía, alrededor de mil expertos de Biobest están trabajando, junto con muchos productores apasionados, para construir soluciones de agricultura sostenible.