El tiempo vuela, al igual que los abejorros de Biobest, que cumplen treinta años zumbando por todo el mundo. Como pionera en la producción de abejorros, con catorce filiales y distribuidores en más de sesenta países, Biobest se ha convertido en una empresa líder en el campo de la polinización y los fitosanitarios biológicos.
Biobest ha recorrido un largo camino desde 1987. Todo comenzó con la iniciativa de un veterinario de Oevel, un pueblecito de Bélgica. Desde pequeño, Roland De Jonghe se sintió fascinado por el maravilloso mundo de los abejorros. A los nueve años escribió su primer libro sobre estos pequeños benefactores. Para los cultivadores de tomate supuso el principio de una nueva era. Comenzó a producir abejorros en su propio jardín e incluso en su sala de estar, pero la incipiente Biobest pronto rebasó los límites de ese espacio confinado. Biobest fue la primera que consiguió producir abejorros a gran escala. El primer criadero se quedó pequeño enseguida. La demanda se disparó: para los cultivadores de tomate, el abejorro pronto adquirió un valor único.
Hoy en día, agricultores de todos los continentes cuentan con la ayuda de nuestros abejorros, y Biobest ha ampliado enormemente su campo de acción. En 1989 comenzamos con la producción de insectos y ácaros beneficiosos. Ahora se nos conoce en todas partes por nuestras soluciones para el control biológico. Insectos y ácaros beneficiosos, sistemas de detección y monitoreo de plagas, feromonas y bioplaguicidas forman parte de nuestra gama desde hace años y han conquistado un lugar importante en el mercado. La demanda de estos productos biológicos surge por diversas razones: nuestros abejorros se establecieron rápidamente en los campos de muchos cultivadores, los cuales rechazaron el uso de plaguicidas por el bien de sus criaturas de rayas negras y amarillas; las regulaciones más estrictas sobre los plaguicidas también llevaron a los agricultores a buscar alternativas biológicas; el consumidor también juega un papel importante: la demanda de productos libres de residuos aumenta constantemente.
Quedarse de brazos cruzados equivale a retroceder; por eso, como empresa influyente y en plena expansión que somos, tratamos de encontrar soluciones cada vez mejores. Las cajas de madera de los años 80 se han convertido en colmenas muy sofisticadas, con una gran cantidad de mejoras tecnológicas. Un buen ejemplo es el sistema patentado de Biobest Flying Doctors®. Para Biobest, el principio fundamental es que el cliente es el rey: proporcionamos asesoramiento personalizado a diario.
La gama de productos no es lo único que ha experimentado una gran ampliación. Hoy, Biobest puede contar con la ayuda de más de 650 empleados que contribuyen diariamente a su buen funcionamiento. Por supuesto, Biobest no sería Biobest sin nuestros distribuidores, ni sin todos los clientes que llevan años creyendo en nuestra empresa. Juntos estamos preparados para los próximos treinta años. Mientras tanto, ¡nuestras más sinceras gracias!
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